Papás al tatamii
A menudo, inscribimos a nuestros hij@s a actividades de las que conocemos, nos dicen que quieren hacer tal o cual deporte y complacemos sus deseos. Pero ¿conocemos qué hacen realmente en esas clases? ¿Están realizando la actividad acorde con su edad? ¿Qué y quién les enseña?, pues bien este fin de semana hemos hecho una actividad en la que hemos querido mostrar a los padres "in situ" los que hacemos en nuestras clases ayudados por con unos maestros excepcionales los propios alumn@s .
La jornada empezaba con una pequeña clase de animación, en la que todos los niños participaben de las actividades, desde los más pequeñitos de 3 años a los cadetes de 16 años, juegos y ejercicios habituales en las clases que damos en nuestro club servían para animarnos.En un principio me daba miedo que los pequeños no interactuasen pues había bastantes caras nuevas para nada se metieron en la dinámica de la clase con el apoyo de Delia y poco a poco se fueron soltando y a trabajar como el que más.
Pequeños y grandes parecían que habían estado entrenando juntos, los peque hacían todo lo que se iba explicando a pa perfección. Todos lo pasaron genial y los padres disfrutaron de el trabajo de los niñ@s, para ir poco a poco a crearles ese gusanillo de entrar y hacer judo con sus hijos. Ellos entrarían a formar parte de la clase, los más pequeños invitaban a sus papás y mamás, alguno vino con su ti@, a entrar a la clase y a enseñarles como se iniciaba una clase de judo y todo lo que ellos habían aprendido, se lo iban transmitiendo a sus acompañantes,una experiencia genial para niñ@s y adultos.
Ver a los papás como se iban integrando, perdiendo ese miedo que nos da a los adultos a sentirnos ridículos, a hacer algo novedoso dirigido por los más pequeños, aunque había algún que otro grande que aprovecho para enseñar a sus progenitores lo aprendido a lo largo de varios años.
Sin duda, la práctica hace que aprecien que es nuestro deporte y que aprenden sus hijos en nuestras clases. Muchos de ellos comentaban al terminar que se habían dado una paliza, que estaban contentos pero agotados, que no sabían lo bueno que era el judo y que cuándo se iba a repetir la experiencia.Eso indica que el objetivo principal se ha cumplido: Todos lo pasamos muy bien.
Una experiencia que repetiremos con algunas novedades para que se haga más deseada y donde nuestros pupilos serán los mejores vendedores de nuestro trabajo y deporte.
La jornada empezaba con una pequeña clase de animación, en la que todos los niños participaben de las actividades, desde los más pequeñitos de 3 años a los cadetes de 16 años, juegos y ejercicios habituales en las clases que damos en nuestro club servían para animarnos.En un principio me daba miedo que los pequeños no interactuasen pues había bastantes caras nuevas para nada se metieron en la dinámica de la clase con el apoyo de Delia y poco a poco se fueron soltando y a trabajar como el que más.
Pequeños y grandes parecían que habían estado entrenando juntos, los peque hacían todo lo que se iba explicando a pa perfección. Todos lo pasaron genial y los padres disfrutaron de el trabajo de los niñ@s, para ir poco a poco a crearles ese gusanillo de entrar y hacer judo con sus hijos. Ellos entrarían a formar parte de la clase, los más pequeños invitaban a sus papás y mamás, alguno vino con su ti@, a entrar a la clase y a enseñarles como se iniciaba una clase de judo y todo lo que ellos habían aprendido, se lo iban transmitiendo a sus acompañantes,una experiencia genial para niñ@s y adultos.
Ver a los papás como se iban integrando, perdiendo ese miedo que nos da a los adultos a sentirnos ridículos, a hacer algo novedoso dirigido por los más pequeños, aunque había algún que otro grande que aprovecho para enseñar a sus progenitores lo aprendido a lo largo de varios años.
Sin duda, la práctica hace que aprecien que es nuestro deporte y que aprenden sus hijos en nuestras clases. Muchos de ellos comentaban al terminar que se habían dado una paliza, que estaban contentos pero agotados, que no sabían lo bueno que era el judo y que cuándo se iba a repetir la experiencia.Eso indica que el objetivo principal se ha cumplido: Todos lo pasamos muy bien.
Una experiencia que repetiremos con algunas novedades para que se haga más deseada y donde nuestros pupilos serán los mejores vendedores de nuestro trabajo y deporte.
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